Covid-19: Trayectorias de razonamiento para la industria expositiva

Covid-19 y los eventos recientes han resaltado cruelmente la imprevisibilidad de nuestros tiempos. Desde las primeras imágenes de China en dificultades, percibidas como algo distantes de la percepción de muchos otros países, con olas de efectos bastante limitadas sobre el sistema de exhibición en el Lejano Oriente, pasamos rápidamente a situaciones como la cancelación y el aplazamiento de cientos de ferias comerciales en todo el mundo.

La situación es tan crítica que hace imposible, al menos a corto plazo, comprender completamente lo que se desarrollará, por lo que es problemático aventurar cualquier pronóstico firme con alguna autoridad en este momento.

Sin embargo, lo que podemos hacer es rastrear las trayectorias del razonamiento, preguntándonos a todos juntos cuál será el papel de las exposiciones en la recuperación de cada industria individual, donde las exposiciones son un gran punto de referencia. Hoy más que nunca debemos trabajar unidos como una ‘industria’. Debemos preguntarnos qué esperaremos en el ‘reinicio’, cuando el mundo pueda reiniciarse, de esos momentos fantásticos de reunión colectiva, conocimiento y actividad cara a cara que llamamos ‘exposiciones’.

Trayectorias de razonamiento

– Apoyo asociativo

Es precisamente en momentos de crisis tan intensa y repentina que podemos ver cuán buena puede ser una inversión para que cada operador invierta recursos y contribuya efectivamente al fortalecimiento de las entidades asociativas.

El papel de UFI (la asociación global para la industria de exposiciones) es fundamental en este momento, y requiere y merece inversión y apoyo económico de todos los operadores de la industria. 

La industria pone las necesidades de las exposiciones en el centro de las agendas gubernamentales, que la mayoría de las veces tienden a ver las exposiciones como un «hecho».

El papel de las exposiciones será esencial para el futuro reinicio del planeta.

 

– Las consecuencias inmediatas

La explosión de la emergencia vinculada a Covid-19 ha dado lugar a una serie de problemas inmediatos, como por ejemplo problemas logísticos relacionados con el cierre de oficinas, opciones sobre la forma de trabajar y los efectos en la fuerza laboral (teletrabajo, inteligente trabajo, permisos, despidos), el uso de herramientas digitales siempre que sea posible (por ejemplo, interacción con clientes, presentación de noticias). No hay duda de que esto está generando un gimnasio digital muy fuerte, aunque no deseado, tanto en términos de métodos de trabajo como de procesos de relación con el cliente.

 

– Gobierno del estrés financiero

Por su propia naturaleza, las exposiciones existen en el momento en que tienen lugar, con una ciclicidad dada por el sistema de producción en el que están inmersas. Para empresas como los organizadores de exposiciones, cancelar o posponer un evento provocará tal contracción en la facturación, que reiniciar puede representar un desafío de época, no solo para el organizador en sí, sino para todo el sector que representa el evento colectivo, y pone en arriesgar la invaluable función de intercambio y comparación que promueve el crecimiento y la innovación.

 

– Innovación forzada

La industria de la exhibición ha estado involucrada durante años en un proceso de innovación que funciona en varias capas. Estos son los principios rectores para el trabajo del Comité Digital UFI e incluyen: transformación digital (revisión de la estructura y procesos del organizador en un contexto que ahora está profundamente digitalizado); transformación de la experiencia (ayuda a evolucionar el modelo de negocio de un enfoque predominante de metro cuadrado a un enfoque de experiencia del cliente); transformación humana (remezclando la habilidad establecida en esta era de la economía del conocimiento, alineando las actitudes de los individuos con los objetivos organizacionales, acercando a las empresas y las personas).

Los eventos recientes nos recuerdan que la innovación es un proceso que involucra:

– gestión de riesgos

– navegando por la incertidumbre

– explorar la ambigüedad

Todo lo anterior cambia la forma en que funciona el negocio de la exposición.

 

– Impacto asimétrico

Podemos esperar que esta crisis conduzca a un sector que ha cambiado profundamente de manera asimétrica y posiblemente con diferentes consecuencias para diferentes operadores.

Primero: se realizarán algunas selecciones importantes entre los operadores. No es un hecho que la ventaja sea solo con los organizadores más sólidos y fuertes.

Recordemos a Darwin:

«No es la especie más fuerte la que sobrevive, ni la más inteligente que sobrevive. Es la que más se adapta al cambio».

En cualquier caso, es probable que tengamos menos organizadores, acelerando una tendencia ya en curso de fusiones y adquisiciones.

Segundo: una transformación de la forma en que los organizadores trabajan y se comportan verá más experimentación de nuevas formas organizativas y contractuales vinculadas a diferentes aspectos económicos (por ejemplo, estructuras más pequeñas, enfoque en datos, metodología de trabajo ágil, formatos de agencia).

Tercero: la creación de asociaciones innovadoras en diferentes exposiciones implicará algunos enfoques y sinergias sorprendentes. En esencia, tendremos constelaciones sinérgicas con operadores de diversos campos.

 

– Preparándose para un nuevo mundo

Sin lugar a dudas, en esta fase de parálisis y aislamiento, la necesidad de enfrentar los desafíos, una búsqueda común de formas de respuesta y la experimentación con prácticas innovadoras está creciendo.

La historia enseña que las compañías que actúan efectivamente durante una crisis se fortalecen después de ella. Los cambios catastróficos que se han producido a lo largo de la historia no conducen a un «fin del mundo» sino al «fin de un mundo», con la generación de nuevos hábitats sociales, empresariales y vitales.

Enrico Gallorini es CEO – GRS Research & Strategy ( www.grsnet.it ) y miembro del Comité Digital UFI